Elecciones 2015
Las diez cosas que hoy tienen que hacer los gestores de campaña (aprovechando los pocos recursos que hay)
En las elecciones 2015 uno de cada dos votantes españoles podría cambiar de opción de voto. Todos los partidos tradicionales están perdiendo votantes fieles. Por primera vez en democracia los votantes españoles no votarán “por tradición” sino guiados por nuevas y diferentes motivaciones.
El fenómeno Podemos (que se alimenta no sólo de PSOE, IU y abstención sino también algo del PP) introduce incertidumbre y fuerza estrategias flexibles. Aún en los sitios en los que no se presente, los votantes valorarán a sus partidos con referencia a Podemos.
Los partidos se juegan el resultado en la capacidad de buscar el voto inteligentemente.
Para ello, todo gestor de campaña en enero de 2015 tiene que:
- Identificar quiénes son sus votantes frágiles (quienes le votaron y hoy están indecisos, o anuncian que se fugan a la abstención o a otro partido).
- Identificar quiénes son sus votantes potenciales (los frágiles de partidos ajenos que podrían venir al partido propio).
- Analizar la matriz de transferencia de voto (que sea fiable estadísticamente) y diseñar el seguimiento de su evolución.
- Delimitar las bolsas de voto: ¿dónde y cuál es el voto posible? Huir de la segmentación vieja y cara y acotar el voto target.
- Explotar datos existentes de comportamiento electoral (requiere un tedioso trabajo de números) para hacer un mapa geográfico del voto posible. Es importante para decidir las zonas prioritarias de actuación y saber en cuáles no hay que desperdiciar recursos.
- Responder a la pregunta: ¿Qué hay que hacer para reforzar a mi votante y captar a los potenciales? Hasta tener la respuesta, hacer caso omiso de los ansiosos por colgar carteles.
- Traducir los datos a estrategia: huir de las extensas descripciones inútiles de datos y buscar indicaciones concretas y prácticas.
- Elaborar las líneas claves de mensaje, con apoyo en un primer borrador de lo que puedan ser las 15 “medidas estrella” que servirán de hoja de ruta para la precampaña y campaña.
- Asegurar que todo el equipo conoce la síntesis de lo anterior y cuál es su cometido en esta campaña.
- Huir de los encuestadores que venden ingentes listas de variables, datos y cruces sin saber para qué. Eso es dinero tirado.